Shakespeare and Company es una librería independiente situada en el quinto distrito de París. Shakespeare and Co. sirve al mismo tiempo como librería y biblioteca especializada en literatura anglosajona. El primer piso sirve también como refugio para los viajeros, conocidos como «tumbleweeds«, albergados a cambio de algunas horas de trabajo en la librería cada día. El piso bajo dispone de un «wishing well», o pozo de los deseos al que los visitantes suelen arrojar monedas.
La propietaria más famosa de la librería fue Sylvia Beach, que regentaba el establecimiento, en el 12 de la calle Odéon, entre los años 1919 y 1941 (el establecimiento se encuentra en la actualidad en el 37 de la calle Bûcherie). Durante ese periodo, la tienda era considerada como el centro de la cultura anglo-americana en París. Era visitada a menudo por autores pertenecientes a la Generación Perdida», tales como Ernest Hemingway, Ezra Pound, F. Scott Fitzgerald, Gertrude Stein y James Joyce. El contenido de la librería era considerado de gran calidad y reflejaba los gustos literarios de Sylvia Beach. Shakespeare and Company, así como todos sus habituales, son mencionados continuamente en A Moveable Feast de Hemingway.
En la antigua ubicación de la Rue de L’Odéon, se hallaba La Maison des Amis des Livres, librería regentada por Adrienne Monnier, amíga íntima de Sylvia Beach. Una librería mítica de la cual hablaremos próximamente.
Recomendamos la lectura de Rue de L’Odéon, editado por Gallo Nero.
Y La librería más famosa del mundo editado por Malpaso.
«Sucede que la librería más célebre del mundo es también la más divertida, la más insólita y, gracias a este libro, la mejor contada.
Con unos facinerosos pisándole los talones, el cronista de canalladas Jeremy Mercer se planta en París a la espera de algo. Cierto día, cuando deambula con aguacero y sin techo por la orilla izquierda, le ofrecen té en una fábula conocida como Shakespeare & Co. Aquella guarida es, en realidad, el segundo avatar de una fantasía ideada por Sylvia Beach en los años veinte como domicilio de una generación no más perdida que cualquier otra, un templo ya difunto pero resucitado durante los cincuenta con extravagantes consecuencias. Allí, sin ir más lejos, residieron Ginsberg, Burroughs, Ferlinghetti y otros tambores de la percusión beat. George Whitman, su nuevo sacerdote, ofrece hospedaje a cambio de trabajo a los letraheridos sin rumbo, y nuestro Jeremy acepta la generosa oferta para acabar convertido en huésped, confidente y factótum del estrafalario posadero.
Lo acompañará en su aventura un formidable reparto de exotismos humanos decididos a llevar la bohemia parisina hasta las cotas más sublimes de lo descabellado. Y lo entrañable. Y lo literario. Porque la librería más famosa del mundo aloja el sueño de unas vidas reales hechas con la materia de la ficción. Este libro es la memoria de esos días».